jueves, 14 de abril de 2016

V TRAIL COSTA QUEBRADA


El 3 de Abril tenía una nueva carrera preparatoria para el maratón de Valdecebollas, el Trail Costa Quebrada, con salida y llegada a la localidad cántabra de Liencres, una distancia de 21 km y un desnivel positivo de 850metros aproximadamente.
Señalización del Monte Tolio

Vista desde la Picota.

Antes de salir, los saludos y las fotos previas con amigos y compañeros de otros clubes, como Triatlón Palencia, Cerrato Trail, algún palentino que otro suelto  y con mi primo cántabro Luis, que iba acompañado de la ultra maratoniana Ana Bustamante y otros amigos.


Con los amigos del Cerrato Trail.
 La carrera sale desde Liencres y va hasta Soto de la Marina, pasamos a correr por los senderos paralelos a los acantilados de la costa del Mar Cantábrico, por esta zona el olor del frescor del mar y los sonidos de las olas lo hacen una zona especial para correr. Después llegamos al Parque Natural de las Dunas de Liencres, con su precioso pinar entre arena de playa y raíces salientes por los caminos, que lo hacen una zona con encanto y especial.
Pedro pillado, foto antes de salir.

 Luego comienza la vertical subida a la Picota desde la cara de Boo de Piélagos,  pasamos por la localidad de Mortera y subimos al Monte Tolio, bajamos y subimos otra pared más parecida a un km vertical que nos sube nuevamente al Tolio y bajamos para dirigirnos a Liencres. El recorrido es espectacular y duro, ya que al principio, por la zona de la costa se va a velocidades rapidísimas, en esta zona los “asfalteros” ganan mucho terreno a los “montañeros”, y después la zona de monte son unas rampas empinadas que solo permiten correrlas a los mejores especialistas en montaña, los demás nos limitamos a andar o al “CACO” (caminar y correr).
La belleza de costa cántabra.

Salía junto a mis compañeros de Maratonianos del Carrión, José, Teo, y César y con mi compañero de club Iván, del Puentecillas Palencia Trail. Nada más salir mi estrategia era muy clara, colocarme por delante intentando estar entre los 100 primeros para no ser obstaculizado por gente con poca experiencia en bajadas y así ir lo más rápido posible por la costa.  Quizá mi salida fue demasiado rápida pero disfruté como un niño, sintiendo la velocidad en las piernas que no puedo tener cuando corro por montaña y además acompañado por mi amigo José, así  se hicieron los primeros kms cortos, muy intensos y fáciles.
Primeros kms.

Las zonas con rocas hacían sacar lo mejor de cada uno técnicamente, y aunque había que ir concentrado por donde pisas, el conocimiento del terreno me permitía el lujo de envolverme en el  olor y el sonido del mar, cuando las olas rompen contra las rocas.
Al llegar a las Dunas se nos unió Cesar  y el valiente triatleta palentino Israel Villullas. Yo seguía en cabeza del grupito que formábamos, explicando el recorrido a mis amigos, todo ello sorteando raíces, árboles y subiendo por los caminos de arena,  ya que desde la costa comienza a ponerse el terreno empinado.
Con Jose y Cesar en Las Dunas de Liencres
La subida a la Picota me recuerda rápido que he ido muy fuerte en el inicio y si no regulo se me puede hacer interminable, así que nos ponemos a andar y empezar a sufrir con la humedad y lo exigente del terreno.  A mitad de subida José y César ya me van dejando atrás unos metros, pero es mejor seguir a mi ritmo y no seguirles si no quiero que me saquen de punto.

En una parte de la subida esta mi amigo Alberto, el tigre extremeño, que no para de animarme junto a Luana, su novia. Eso me viene muy bien me da un plus y ¡¡venga para arriba!!.
Al llegar arriba las piernas las noto flojas y durante la bajada no recuperan como otras veces, lo que me hace bajar más lento que de costumbre y voy siendo rebasado por varios corredores, bebo isotónico y como algo, pero aun así no logro encontrarme cómodo.  
En lo alto de la Picota, el cansancio es patente
En la subida al Tolio desde Mortera tomo un gel con previsión a los últimos kms que tendré el tramo más duro de la carrera, y voy poco a poco encontrándome mejor, la bajada del Tolio es muy técnica, como pequeños escalones que resbalan y pido paso a varios corredores, mi ritmo es más alto en esta zona y además me siento a gusto, mis cuádriceps duelen pero….¡¡me gusta!! .

 Ya en los dos últimos kms está la subida cronometrada al Tolio y su posterior bajada hacia la meta, la subida es tremenda cuando llevas tanto cansancio, pero los ánimos de Vane y mi amigo Pedro Villegas, que se encontraban en zonas distintas de la subida animándonos y haciendo fotos para el recuerdo, me ayudan mucho y voy más cómodo de lo que me pensaba.
Subiendo desde Mortera al Tolio.

 Ya en el último km en cuanto piso el asfalto me encuentro fuerte y arranco con un ritmo por debajo de 4min el km, voy volando, a pesar del esfuerzo anterior, y al contrario que los demás corredores que van a trote por el cansancio yo voy prácticamente “a tope”, ¡¡¡¡dios!!!!, estoy pletórico, me siento ahora con más ganas que nunca y no bajo el ritmo hasta pasar por el arco de meta.

Ultima subida al Tolio, tramo cronometrado.
Tengo una anécdota graciosa de la llegada, mientras entraba en la recta de meta la gente recogía a sus hijos para la foto, y cuando yo iba a adelantar a un corredor, que estaba al inicio de la recta de meta, éste les dijo a sus hijos: “vamos daros prisa que me adelantan”, ja ja ja ja, con las mismas se pone a mi par el niño mayor,  y a esprintarme, ja ja ja ja, que es el que sale en mis fotos de llegada. Un crack el niño. Últimamente sólo llego con niños a la meta que no son míos….¿será una premonición?. Ja,ja,ja,ja.
El pequeño esprintandome, 


 Que satisfacción llegar sabiendo que lo has dado todo y poder llegar con tanta fuerza, al final 2h:14min:20seg de tiempo oficial, llegando el 148 en la general y el 47 de mi categoría Veterano A masculino, entre los 648 corredores/as  que entraron en meta en la distancia de 21 km.

Quiero dar las gracias a mis amigos de Maratonianos del Carrión por haberme acompañado en este día y haber descubierto la zona donde entreno y disfruto últimamente, también a Pedro Villegas que se desplazó a pasar el día con nosotros y no paro de hacernos fotografías.
Ahora, a terminar de prepararme, para ponerme a prueba en el maratón de montaña de Valdecebollas.
Foto finisher con Cesar(102) y Jose(330)

HASTA EL 29 DE MAYO AMIGOS…….



ALBUM DE FOTOS DEL FACEBOOK DE PEDRO VILLEGAS


MI ALBUM DE FOTOS DE LA CARRERA


CARRERA EN GARMIN CONNECT

CLASIFICACIONES

lunes, 21 de marzo de 2016

TRAIL TRES VALLES

Una de las calles del bonito pueblo
Cuando me quise apuntar a Tres Valles, hablando con el mister, Fran, iba a inscribirme a la carrera corta, pero se me quedaría un poco corta, me decía el, y la larga se quedaría un poco larga, así que con los ánimos de Fran y de mi amigo Víctor que me ayudaría a correrla para ir tanteando la distancia y el desnivel, me arriesgué y me inscribí.
Con Javi en la salida
Me levantaba muy prontito para desayunar bien y cargar de reservas, mientras se despertaba un precioso día en La Alberca, el sol salía, el sonido del río que pasa a los pies del hotel junto al frescor de la mañana, se unen al nerviosismo previo a la carrera.
El pueblo estaba vestido de gala, lleno de montañeros y corredores, mujeres y hombres, niños y acompañantes, caras de felicidad y de nervios mientras el gran speaker, Depa , va animando los momentos previos.
Los compañeros del Puentecillas Palencia Trail
Me encuentro con mis compañeros del club y con Javier Ruiz Monge, el tío con el que empecé en esto, su abrazo me serenó y no se despego de mi lado, ayudándome a estar mas tranquilo en esos momentos previos.
Depa comienza la cuenta atrás, y salimos los más de 300 o 350 corredores de la carrera de 36 km y 2150 metros de desnivel positivo, callejeando por la preciosa villa para ir saliendo a un monte previo antes de subir a la Peña de Francia(1720mts). Nuestro ritmo es bastante lento y nos dejamos adelantar por muchos corredores para quedarnos en la parte de atrás de la carrera, hasta Javi nota que vamos a ir lentos por precaución y se nos va un poco más adelante. Justo cuando comienzan las primeras rampas de la Peña de Francia nos ponemos a andar, cosa que voy a hacer durante todas las subidas de la carrera. Víctor va marcando el ritmo, ya que el tiene la experiencia de otras carreras, y asi llegar en tiempo a los cortes para poder acabar.
Victor(230), Javi y yo al comenzar la carrera
 Durante la subida a la Peña de Francia  el sol va pegando mas y aunque aún se nota el fresco de la mañana se agradece ese solillo. Los voluntarios por donde vas pasando te van animando y como siempre se lo agradecemos, sin ellos no sería posible hacer estas carreras, son muy importantes y en esta carrera han sido de sobresaliente. A mitad de la subida a la Peña de Francia el terreno es precioso, se pone zigzagueante y vamos pendientes de dejar pasar a los bravos corredores de la carrera de 18 km entre los que van mis compañeros Steven (tercer clasificado junior) y Héctor ( cuarto junior). En la parte de arriba llegamos a la preciosa Ermita de Nuestra Señora de la Peña de Francia donde está el primer avituallamiento, una breve parada para rellenar sólo de isotónico hace que adelantemos varias posiciones.
Paso de los Lobos
 La bajada, en dirección al primer corte cronometrado, es una zona técnica pedregosa, y después del paso de los lobos el terreno se hace mucho más rápido por sendero, aunque vamos sin forzar, es muy rápida, la zigzagueante, frondosa y  bonita  bajada al primer valle. Por esta zona volvemos a juntarnos con Javi hasta llegar al puente de la Yunta donde se ubica el siguiente avituallamiento nosotros apenas paramos ya que vamos haciendo nuestros propios avituallamientos en carrera y así vamos más rápido. Comenzamos a subir un cortafuegos muy largo, por el cual vemos a todos los corredores enfilados y en lo más alto un pico de piedra, donde nos vamos preguntando,  si habrá que subir allá arriba. Algún voluntario nos dice que no, subir sería una pasada así que no esperamos ir hasta allí. Van cayendo los metros de desnivel poco a poco y vamos a buen ritmo adelantando a algún corredor que otro mientras me va amenizando la carrera Javi con sus ánimos unos metros más atrás de nosotros , ja ja ja, es un fenómeno. Al llegar al final del cortafuegos vemos gente por la zona rocosa y según te vas adentrando se pone más y más complicado con grandes rocas, donde hay que estar muy concentrado.
Iniciando la subida a la Mesa del Francés

 Esta es la sorpresa de la organización, “MAGNETOTERMIA”, según subes hay carteles de ánimo y frases explicativas de que es la “magnetotermia” , el último tramo es de ayudarse con las manos y al llegar arriba…¡¡vualá!!, la Mesa del Francés, que separa los dos valles.
 La bajada es por el Valle de las Batuecas, precioso, lo más bonito de la carrera, y muy muy técnico. Según vas bajando el disfrute es máximo, pero también va desgastando las piernas. Hay muchos voluntarios señalizándonos las zonas más peligrosas, como el cruce de un río mediante cuerdas, donde nos  tuvieron parados los bomberos para rescatar a un corredor lesionado.
MAGNETOTERMIA
 Por esta zona según vas bajando se nota como sube la temperatura y el grado de deshidración va aumentando. Necesito quitarme la camiseta térmica, pero aguanto hasta parar en  el avituallamiento del Monasterio de las Batuecas, creo que me equivoqué y después lo pagué. En el avituallamiento nos paramos un poco más que en los demás, veo por primera vez a Vane, tambien a la mujer y las niñas de Víctor, llevamos 5 horas corriendo y para ellas es un alivio vernos, han visto ir a los bomberos y ven llegar gente sufriendo mucho, comentando lo duro del recorrido y están un poco asustadas.
Monasterio de la Batuecas
La subida al Portillo (1252mts) la comienzo a buen ritmo, Víctor que se encuentra muy bien se va, y yo a mi ritmo voy subiendo muy cómodo, pero cuando me falta la mitad de la subida(unos 300metros de desnivel positivo), ¡¡¡¡¡ ZAS !!!!! el señor del mazo me atiza.
El golpe es de tal calibre que no puedo apenas dar un paso, el sufrimiento es máximo, las pulsaciones se bajan, el reloj me avisa de pulsaciones bajas constantemente y soy incapaz de ir más rápido, me apoyo en mis bastones a cada paso para ayudarme pero ni aún así puedo recuperar, me pasan muchos corredores entre ellos Javi que me anima, pero no puedo, me veo impotente y se pasan por mi cabeza mil cosas, pierdo la concentración llevada en toda la carrera y lo único que me lleva a avanzar es llegar a la meta y conseguir lo que estoy buscando, me esperan en meta, y tengo que llegar por toda esa gente.
 Al llegar al final del puerto,el cansancio y sufrimiento junto a los ánimos de la gente que se encontraban arriba me emocionan,  ya queda solo bajar, aunque faltan 3 o 4 kms, ya es ir recuperando para entrar al pueblo.
Al llegar a La Alberca, siento ese alivio, emoción y alegría, junto al cansancio y la poquita fuerza que me queda, veo a todos mis compañeros del club y seguido veo a Vane y los arcos de la meta, me acompañan la hijas de Víctor en mi entrada, ¡¡¡¡¡¡ por fin!!!!!! , ¡¡¡conseguido!!!, ¡¡¡ 6 horas y 21 minutos!!!, soy finisher de una carrera muy dura, y muy bonita, la más importante para mi hasta el día de hoy.
Llegada a meta,escoltado por las niñas de Víctor.
 Para dar una idea de la dureza hubo aproximadamente 70 retirados y abandonos por unas u otras causas. La organización de la prueba ha sido de sobresaliente, al igual que el voluntariado y seguridad de la misma, la carrera es ¡¡¡¡INCREIBLEMENTE BONITA Y DURA!!!! Gracias, por esta carrera, a Manuel, Lauri y demás organizadores.
Foto finisfher con el sensei montañero, Javi.

Quiero dar las gracias a Fran Caballero, mi entrenador, a Marco Antonio Sanchez, mi fisioterapeuta y a Rocío Diago mi nutricionista, sin ellos seguro que no habría conseguido esto.
También a Víctor y Javi por acompañarme en este día tan bonito, a Almudena, Claudia y Olivia, a mis compañeros del equipo, también a ti lagartija que me llamaste pronto por la mañana.

Y no puedo olvidarme  de dedicárselo a la persona que ha sufrido más de lo que yo he podido hacerlo, Vanessa , va por ti cariño, que siempre estas ayudándome a conseguir estas cosas.



domingo, 17 de enero de 2016

SAL CUANDO QUIERAS 2016



Comenzamos el 2016 con buenas sensaciones. 
El pasado sábado 16 de Enero de 2016 daba pistoletazo a la temporada, una temporada ilusionante y de la que espero sea apasionante.
Este año después de la larga lesión que me tuvo apartado, he vuelto a retomar los entrenamientos por el monte. Para ello en el mes de Septiembre, me inscribí al club Puentecillas Palencia Trail, para llevar unos entrenamientos más personalizados y especializados en montaña.
Después de unos  meses entrenando, en los que he podido disfrutar con mis nuevos compañeros del equipo, voy sacando buenas conclusiones y creo que si voy por el camino que nuestro entrenador Fran nos va marcando, puedo aprender y disfrutar mucho de este mundillo de carreras, que cada día tiene más adeptos.

Algunos compañeros del Puentecillas Palencia Trail.


Para empezar la temporada corría mi primera carrera en casa. Podía disputar por primera vez esta carrera, ya que aun no lo había hecho nunca en las 6 ediciones que ya llevan del Trail palentino, Sal cuando quieras, llega cuando puedas. Quiero destacar la perfecta señalización del recorrido y la excelente organización por parte de Linum Berco y sus colaboradores.
Me presentaba en la línea de salida con poca confianza, unos problemas físicos no me han permitido entrenar bien últimamente, y las sensaciones en las tiradas largas de los entrenamientos no eran las mas halagüeñas. Para esta carrera iba a comenzar junto a los amigos asfalteros de Maratonianos del Carrión, con los que he compartido muchos kilómetros de entrenamientos y carreras en años anteriores.

Con los amigos de Maratonianos del Carrion.


La mañana era fría, con la primera helada importante del año, esta ayudaba a mantener las zonas embarradas mas duras de lo normal, pero también con el problema de que patinábamos mucho, sobre todo en las bajadas donde había que tener una precaución especial. Los charcos creados por los últimos días se convertían en peligrosas  pistas de hielo que había que evitar.
A las 10 de la mañana salíamos la gran mayoría de corredores que íbamos a efectuar la carrera de 21 kilómetros, con un desnivel positivo de +400 aproxidamente, todos con la misma intención de no encontrarnos con mucho barro. Tengo que explicar también qué esta carrera es especial ya que como su nombre indica, cada corredor sale a la hora que quiera y los tiempos se cogen en modalidad contrarreloj.

Primer kilómetro todos juntitos, Foto Edu Sanz para Palencia Trail.


La subida por la perrera va seleccionando ya a los corredores que van a ir más rápidos, los grupos como el nuestro se estiran y cada uno va al ritmo que su cuerpo le permite, para luego reagruparnos al llegar al primer avituallamiento en la parte de arriba de la subida. En nuestro grupo vamos Teo, Choche, Jose, Pedro y yo, Felix se nos fue nada más empezar las primeras rampas. Llegamos a la primera bajada importante, una bajada que ya conozco muy bien de mis entrenamientos y a pesar de estar peligrosa por estar helada yo me lanzo con seguridad y sin miedo, es esta mi forma de bajar, a veces un poco alocada pero donde sale la adrenalina y disfruto al máximo. En este punto adelanto a unos cuantos corredores y saco una distancia importante a mis amigos que van recortando poco a poco en las subidas y zonas llanas. 

En pleno esfuerzo de la bajada, zigzagueando y saltando.

Todos los avituallamientos los utilizamos para reagruparnos, y en estos puntos voy viendo que el plan de entrenamientos funciona, ya que me encontraba mucho mejor de lo que pensaba, puedo ir muy rápido y las subidas en las que sufría mucho entrenando las puedo hacer sin problemas, corriendo y además bastante rápido. A los casi 13 kilómetros con permiso de mis compañeros me suelto y junto con Jose Antolin nos vamos alejando de ellos y comenzamos una carrera distinta en la que  me siento libre, disfruto de los ritmos altos en las zonas llanas de paramo, las subidas no me cuestan y puedo imprimir ritmo alegre de subida y en las bajadas vuelo , arriesgo y desciendo con una soltura que me permite adelantar a mucha gente y disfrutar a tope de la carrera. 

En un avituallamiento en el páramo.

Todas estas sensaciones me provocan un estado de felicidad que hace crecerme y continuar hasta el final a tope. Jose aprovechaba las subidas y las zonas de llano para recortar la distancia que le sacaba yo en las bajadas y reengancharse a mí, pero a 2 kilómetros de meta se convirtió en mi mejor ayuda, al ser el que puso el ritmo y haciendo que fuera muy rápido y no bajara la intensidad en los últimos kilómetros. Nuestra  entrada en meta fue increíble, llegando muy fuertes y yo con una felicidad inigualable.

Llegada a meta, con Jose Antolin.

Al final todos acabamos la carrera con mejor o peores sensaciones pero todos pasando el arco de meta. Quiero destacar a Pedro que cuando hacemos quedadas así en las que coincidimos todos, aprovecha a hacernos buen reportaje gráfico para nuestro recuerdo y el tío se mete unos cambios de ritmo espectaculares para adelantarse y poder hacernos las fotos, gracias Peter.
Después de esta carrera tengo programadas otras 3 o 4 carreras más para continuar la preparación de mi objetivo, entre ellas están los Tres Valles en Salamanca valedera para la copa de Castilla y Leon, y el Costa Quebrada en Cantabria como las mas importantes.